Hoy, día 13 de diciembre, publicados quedan los resultados de la segunda y última semifinal del I Torneo de Contrastes Liberales, en la cual participarán David Lagarejos (articulista y estudiante de Ciencias Políticas y Gestión Pública en la Universidad Rey Juan Carlos), quien ganó la anterior semifinal, y Brian Castro (estudiante de Bachillerato en el IES Abastos de Valencia). A lo largo del artículo se expondrán sus respuestas.
En primer lugar, se les pidió una valoración de la propuesta de extensión del modelo MUFACE al resto de ciudadanos españoles (de manera que no solo puedan disfrutar del mismo los funcionarios del Estado), con el objetivo de dar pasos en materia de liberalización sanitaria. Respondieron con lo siguiente:
- Brian: El modelo de MUFACE puede parecer algo liberador, y algo atractivo que los liberales podríamos ver con buenos ojos, pero, ¿realmente es así? Es cierto que estamos hoy día ante un monopolio estatal sobre un tema tan importante como la sanidad, pero es cierto que hay que dar pasos, y los pasos que se tienen que dar son los correctos y los necesarios, por ello veo innecesario pasar al modelo MUFACE, por que al fin y al cabo, el que sigue controlando el mercado sigue siendo el estado, que es como si pasamos una pelota de mano, cambia de mano, pero la mano sigue siendo del mismo dueño.
- David: No exactamente. La idea de liberalizar el sector sanitario no debe ir de la mano de la universalización de MUFACE. Simplemente con sacar la sanidad del presupuesto público y que haya libertad de oferta debería ser suficiente. Que cada ciudadano pudiera elegir el modelo sanitario que mejor se adaptara a sus necesidades. También pudiera ayudar la implantación del “cheque sanitario”, que funciona muy parecido al “cheque escolar”, por el cual se permite la libertad de elección entre sanidad pública y sanidad privada, mejorando la competencia entre ambas y permitiendo, a fin de cuentas, una sanidad al servicio de los usuarios y no de mandatos políticos.
En segundo lugar, se les preguntó si estarían de acuerdo con la derogación de las colegiaciones profesionales. A estos respectos, piensan lo siguiente:
- Brian: Totalmente de acuerdo, no podemos reducir las competencias a los profesionales, las liberizaciones siempre son buenas, y siempre han beneficiado a todo ámbito al que se ha aplicado. Las competencias, son del competidor, jamás de ningún político o de ninguna normativa. Es comprensible que surgan dudas en el ámbito sanitario, pero si en las demás funciona a la perfección, ¿Que problema hay?
- David: Por supuesto. Las colegiaciones no dejan de ser una obligación por parte del Gobierno, quien decide en última instancia qué profesiones deben tener o no una colegiación. Si el mercado laboral demanda a gente con colegiaciones, la gente se colegiará; si no, no. Es una prueba más de que son los poderes públicos quienes regulan hasta el más mínimo detalle del mercado laboral.
En tercer lugar, nos centramos en una propuesta que jamás se le ocurrirá a ningún estatista. ¿Piensan que podría tener éxito la sustitución de las concesiones de ayudas sociales por deducciones y/o exenciones fiscales?
- Brian: Por supuesto que sí, en primer lugar la percepción que tiene la gente sobre el dinero cambia, y no es lo mismo que te quiten hoy diez euros y en un mes te den dos euros, que simplemente no te quiten los diez euros. Por otra parte, es un sistema más meritocrático, al deducir distintas actividades que puedan contribuir al progreso y desarrollo de un país, en vez de gravar y castigar en forma tributaria, al creador de progreso y desarrollo, que al fin y al cabo siempre acaba siendo el individuo, o un grupo de individuos libremente unidos.
- David: Estaría más de acuerdo en una reducción de impuestos y que se le diera más importancia a la caridad privada y voluntaria. El problema de las exenciones fiscales es que entra en juego la arbitrariedad de los políticos a la hora de fijar las condiciones para optar a esas deducciones o exenciones. Ahora bien, prefiero esto a las ayudas sociales, es decir, prefiero tener más dinero disponible a tener que pagar más obligatoriamente para otros (y a que otros paguen). Es muy importante remarcar que la solidaridad es voluntaria y no obligatoria.
Aprovechando ciertas noticias de actualidad, se les preguntó si creían que se debería acabar con el Tratado de Schengen, que garantiza la libertad de circulación de personas entre los países de la Unión Europea más algunos que no están en la misma, pero sí en la EFTA. A continuación se desarrollan su posturas al respecto:
- Brian: Por supuesto que no, esto vulnera un derecho fundamental, que es la libertad de estar en nuestro propio planeta, parece aberrante la opción de derogar el tratado, simplemente por unos ataques terroristas recibidos dentro de Europa. No se puede derogar, porque tendría gran impacto tanto social, como económico. Nos estamos jugando la libertad, y con eso, no pienso jugar, ni coaccionar a ningún ciudadano de moverse libremente por Europa. Mi vecino no ha hecho nada por destruir Europa, no se porque se debe coaccionar su libertad de movimiento cuando a quien hay que aplicarlo es a los que han cometido tal crimen contra Europa.
- David: No. Debe haber total libertad de circulación, tanto de capitales como de personas (libertad de movimiento), entre diferentes países de un mismo continente, y entre países de diferentes continentes. La Declaración Universal de Derechos Humanos lo recoge en estos términos en su artículo 13: 1) Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado. 2) Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país. La publicidad del miedo no debe arrebatarnos la libertad, y algunos están aprovechando, por ejemplo, el miedo al yihadismo islámico para ir arrebatando poco a poco libertades a todos nosotros.
Con motivo del Día de la Constitución, que tuvo lugar hace una semana, se decidió tratar sobre la misma. ¿Considerarían acertado derogar la Constitución Española a fin de que este país no tuviere un texto jurídico de este tipo, al igual que Reino Unido?
- Brian: No hace falta destruir un documento como una Constitución, pero si que hace falta una reforma, y el principal argumento que está a mi favor, es que no vivimos en una época post-franquista. Vivimos en el año 2015, y como tal, la sociedad cambia, y así debería ser la constitución, una constitución moderna, ligera, que recoga los derechos fundamentales, que se rija a la época, a donde estamos, 40 años casi después, no podemos tener la misma constitución, hay que cambiarla, y revisarla, y cambiarla a lo que somos hoy, hombres racionales y con ganas de avanzar hacia la libertad, no a lo que fuimos, hombres con miedo de volver al terror franquista.
- David: Reino Unido no tiene una Constitución como tal, pero la importancia del derecho consuetudinario (derecho no escrito, se refiere a las costumbres de una sociedad) es mayor que en España. Viendo la actual clase política que tenemos en nuestro país, lo mejor sería reformar la Constitución, no derogarla. Un texto constitucional que tenga en cuenta unos valores comunes e hiciera inviolables los 3 derechos naturales del hombre: Vida, Libertad y Propiedad. Una Constitución no puede ser un catálogo de derechos que se les antojen a colectivos de todo tipo. Respetando la vida, la libertad y la propiedad emanan los demás derechos.
Para finalizar, se les propuso comentar, en relación con la decisión de donación del 99% de las acciones por parte del fundador de Facebook, el siguiente texto de la filósofa Ayn Rand: “El altruismo es lo que está destruyendo al capitalismo. Adam Smith fue un economista brillante; estoy de acuerdo con muchas de sus teorías económicas, pero no estoy de acuerdo con su tentativa de justificar el capitalismo por razones altruistas. Mi defensa del capitalismo está fundamentada en los derechos individuales, igual que lo hicieron los Padres Fundadores de los Estados Unidos, quienes no eran altruistas. Ellos no dijeron que el hombre debe existir por los otros; dijeron que debe buscar su propia felicidad” (Fuente: Objetivismo.org). Sus analíticas fueron las siguientes:
- Brian: En primer lugar, el capitalismo, es la libertad económica en su mas alto grado, y ello conlleva a que los individuos son libres para dar dinero a quien ellos quieran. El altruismo no destruye al capitalismo, porque el altruismo sigue metido dentro del capitalismo, siempre cuando este sea libre, por lo tanto, podemos deducir, que cualquier acción de donación libre, es llamada liberalismo, por el simple hecho de haberse cometido en libertad. El altruismo nunca desaparecerá, porque aparte de nuestra naturaleza a acumular riqueza, tenemos un gran don, que es el de la solidaridad.
- David: En este texto Ayn Rand nos habla de que el capitalismo debe ser un modelo por el cual cada persona busque su propia felicidad y no dependa de los demás. Dicho esto, creo que la voluntariedad debe estar por encima. Si un empresario quisiera donar una parte o la totalidad de su patrimonio a la caridad, no veo el problema, siempre y cuando esa acción lleve consigo la responsabilidad de saber lo que se está haciendo. Si no quiere, tampoco vería el problema. La solidaridad es voluntaria, y cada uno debe saber si puede o no donar parte de su dinero a otros. El problema viene cuando es el Estado quien decide la solidaridad y la impone a todos.
En conclusión, finaliza otra sesión de contraste que no deja de lado ciertos aspectos de la actualidad. Se podrá votar a quien consideréis como merecedor de la victoria en una tuit-encuesta que se abrirá por el mediodía o a primera hora de la tarde (durante 24 horas). Quien gane, a la final pasará.
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