El pasado 27 de julio, un juzgado de Zamora condenó al periodista de ABC y socio honorífico de EL CLUB DE LOS VIERNES (CdV) Hermann Tertsch a pagar una indemnización de 12.000 euros al padre de Pablo Iglesias, líder de la formación comunista PODEMOS.
El motivo del pleito se remonta al día 17 de febrero de 2016, fecha en la que Tertsch publica un artículo en ABC, titulado El abuelo de Pablo, en el que aseguraba que el abuelo del líder comunista en cuestión fue condenado a muerte por participar en sacas durante el transcurso de la Guerra Civil, en Madrid.
Precisamente, el columnista escribió lo siguiente: “El abuelo de Pablo Iglesias fue condenado a muerte por participar en sacas, es decir, en la caza de civiles inocentes desarmados en la retaguardia en Madrid. En concreto, por ser quien identificó y sacó de su casa para asesinarlos al marqués de San Fernando, Joaquín Dorado y Rodríguez de Campomanes, y a su cuñado, Pedro Ceballos. Eso fue el 7 de noviembre de 1936” además de señalar, en referencia a Pablo Iglesias, que “es preocupante la admiración sin reservas que muestra hacia aquel miliciano criminal un nieto suyo que puede pronto gobernar España”.
Pues bien, al respecto y sobre otros temas de actualidad tanto nacional e internacional, se ha entrevistado, a continuación desde el CdV, al periodista Tertsch, que piensa recurrir la sentencia.
1) En relación a la sentencia por el artículo sobre el abuelo de Pablo Iglesias, la cual consideramos totalmente injusta por suponer un atentado contra la libertad de expresión, ¿podría indicarnos de qué fuentes recopiló la información? ¿Cree que con esta querella los Iglesias buscan básicamente intimidar a aquellos periodistas críticos con el totalitarismo (comunista en este caso)?
Todo lo que se afirma en el artículo el abuelo de Pablo ha sido publicado antes en artículos de prensa y en libros. Además, por supuesto, de los documentos históricos que se presentaron en fotocopia en el juicio. Es cierto que consta que Manuel Iglesias fue condenado a muerte por rebelión militar. También lo es que fue buscado desde prácticamente el principio de la guerra por el asesinato del Marqués de San Fernando y su cuñado como consta en los informes policiales y de la autoridad local. Mano derecha de Margarita Nelken hasta el extremo de ser su tesonero en los mitines electorales en las tres elecciones 1931, 1934 y también 1936, cuando vuelve de la URSS, ya confirmada Nelken tras su participación en el golpe de 1934 y su huida de España como uno de los elementos más radicales sovietizados del régimen. Eso casa poco con el socialdemócrata católico que quiere vender la familia. Que en 1938 encontrara un cura en Madrid para su matrimonio por la Iglesia debió de ser difícil, pero le sería muy útil para después de la derrota del Frente Popular que ya se vislumbraba. Manuel Iglesias también fue mano derecha de Nelken para llevar armas a Extremadura, de donde huiría de inmediato ante el avance de las tropas de Franco. No se le conoce más actividad en el frente. Siempre en la retaguardia como condenaba el poeta Manuel Hernández a cierto perfil del “político en armas“. Iglesias hizo méritos con Nelken. Por su superior preparación supo colocarse bien ante la derrota. Y tras ella hizo méritos con ayuda de sus amigos falangistas de su época de estudiante para adherirse al régimen. Como demuestra su inaudito ingreso cinco años después de ser condenado a muerte en el ministerio de Trabajo de Girón de Velasco, el gran acorazado ideológico de la Falange en la administración de Franco. Allí medraría la familia Iglesias, que casó a hijas e hijos con gentes de relieve e influencia en el régimen franquista. Participaba en tertulias con muy conspicuos fascistas nada menos que en el diario Arriba y metió a la mayor parte en la administración. Iglesias fue en todos los sentidos un enchufado del régimen de Franco después de haber sido condenado a muerte y conocerse su papel en la desaparición del Marques de San Fernando. ¿Por qué? Si lo sabe alguno de los hijos, desde luego no lo cuenta. Prefieren mantener sus mitos, tan útiles para la guerra política del nieto.
2) En relación a la situación de Cataluña, ¿plantea usted la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española? Aparte de ello, ¿a qué factor acusa más el auge de la amenaza secesionista: al Estado Autonómico (que tiene competencias en Educación) o a la mera existencia de medios estatales y de un sistema educativo subordinado a los burócratas de turno? Por otra parte, ¿qué cree que ha incitado a la ultraizquierda a hablar de “plurinacionalidad”? ¿Podría poner ejemplos de casos en los que sí fuera factible distinguir entre Estado y nación?
Lo que llaman el problema de Cataluña es un problema más de España, su sistema político y sus lastres del franquismo, la perversa identificación con la dictadura de tantos valores que son necesarios e imprescindibles para el funcionamiento de un Estado y la vida de una nación, y la salud de una sociedad. El primero de estos valores es la unidad de España, que en vez de defenderse como principio incuestionable -que lo debe ser para cualquiera que no quiera un nuevo derramamiento de sangre en España-, se ha ridiculizado, relativizado e identificado como un principio del franquismo en vez de considerarlo como algo de la historia de una nación cuyos orígenes hay que buscar mucho antes de la invasión musulmana. Después todo ha sido la política de conveniencia de los grandes partidos que han canjeado con los nacionalistas periféricos por sistema pedazos de soberanía nacional por mayorías parlamentarias. Y la entrega a estos nacionalistas y a otros muchos émulos de las competencias de educación más la permanente supremacía hoy ya hegemonía total del mensaje de la izquierda en los medios españoles. Esto solo ha sido posible con la más mezquina complicidad del PP surgido de la catástrofe de aquel 11M que hizo descarrilar a España. Un terrible hito en la historia de España que impidió la probable superación de las anomalías con otra legislatura sin tener en el poder a la izquierda, la gran enemiga de la normalización de España. Fuerzas importantes, no cuatro camellos yihadistas, lo quisieron así y tuvieron éxito. Pero parte de la lógica impuesta por las bombas de Atocha está que quien cuestiona su autoría y la versión oficial se convierte en un paria político y social en la España post-11M. Y esa es una lógica implacable que se ha cumplido a rajatabla. Hace falta mucho coraje o muy pocas ambiciones para desafiarla.
Tras el 11M llegó el tiempo de la impunidad. Ante todo la de ETA con su pacto con Zapatero, que después ha sido mantenido por Rajoy. Y es que la impunidad ha desatado y dado vía libre a todas las fuerzas contra la España constitucional e histórica. La coordinación de izquierdas y separatistas, terroristas incluidos, lo ha hecho posible. Así llegamos a donde estamos. Cuando aun resuenan las risas de todos los periodistas del sistema que ridiculizaban a quienes bajo Zapatero advertíamos del peligro para la unidad de España. El miedo a esa ridiculización y a ser tachado de franquista ha paralizado muchas fuerzas y ha sido un arma muy efectiva de la izquierda y todos los participantes en la destrucción de la españa constitucional.
3) Según el último estudio del CIS, el PSOE de Sánchez remonta y, junto a PODEMOS, suman más que Ciudadanos y el PP. Se puede interpretar con facilidad que sigue existiendo una amenaza comunista y frentepopulista pero, ¿qué cree que empuja a buena parte de la ciudadanía española a votar lo que Hayek definiría “camino de servidumbre”? En todo caso, se puede decir que el nihilismo y la irreversible centro-izquierdización del PP así como el no haber resultado C’s nada esperanzador siguen incentivando la abstención. Hay quienes dicen que basta con que se vaya Rajoy pero, ¿no cree que sería inútil que le sucediera alguien igual de socialdemócrata y partidario del totalitarismo de la ideología de género? Aparte de ello, ¿por qué los políticos españoles no se atreven a librar una batalla dialéctica con coraje frente al comunismo?
Todo el panorama político revela que España tiene una sociedad ahora fraccionada y exhausta gracias a toda la descomposición político cultural de las pasadas décadas. La mediocridad monstruosa domina todo el mundo cultural y mediático, y lo tiene bajo el firme control de un discurso izquierdista anti-español. No hay hoy una masa crítica ni siquiera para una reacción inicial. El desinterés, la parsimonia más cínica y la indolencia de la que es elemento ejemplar el presidente del gobierno son dominantes en la sociedad y son ya varias las generaciones que han sido adoctrinadas o simplemente formadas por el entorno en la negación d todo esfuerzo por lo público. Contrasta ahí la inmensa generosidad que siempre muestra el español en las relaciones humanas, desde la donación de órganos a la ayuda en catástrofes o la hospitalidad con el refugiado, con su cicatería en cualquier sacrificio por la acción pública. Y su cobardía para decir lo que piensa y asumir las consecuencias. Así, los únicos que tienen algunas convicciones y pocos escrúpulos, los comunistas de Podemos, sí, llamemos a cada uno por su nombre, los comunistas de Podemos y los separatistas arrollan y desprecian permanentemente a una mayoría que piensa con sentido común solo en el terreno privado porque no se atreve a exponerse al riesgo que supone hacer pública su defensa de la racionalidad y el sentido común. En la recentralización del Estado, en la vuelta de la autoridad y unidad en la educación o en la persecución de la delincuencia. La izquierda ha abandonado la senda constitucional. El PP solo hace seguidismo ideológico de la izquierda para hacerse perdonar su origen y su corrupción. Y Ciudadanos, que podía haber tomado al asalto todo el espectro político que demanda valores y principios fuera de la izquierda y el separatismo, se ha hundido en el mismo barrizal de inanidad de la corrección política.
4) Hablemos ahora de la Unión Europea. ¿Cree que a pesar del Brexit, avanzaremos hacia una unión política o que, por el contrario, retornemos a la CEE? Hay que tener en cuenta que el euroescepticismo no está en horas bajas. En Holanda, hay un amplio porcentaje de euroescépticos y Wilders remonta; en Francia, más de la mitad se abstuvo en las elecciones legislativas; en Eslovaquia, un partido liberal euroescéptico no deja de subir en los sondeos, cosa que ocurre también con los derechistas de Suecia (Sverigedemokraterna); el 60% de los polacos prefiere salir de la UE a aceptar a los llamados “refugiados”; y se prevé que Orbán revalide su mayoría absoluta (este último no es euroescéptico pero pone en jaque al establishment progre-socialdemócrata europeo). Por cierto, en materia monetaria, ¿cree que la moneda única nos beneficia o que, en cambio, convendría regresar al patrón oro y adoptar criptomonedas como Bitcoin y el Hayek?
La socialdemocracia de todos los partidos en Europa occidental es especialista en disfrazarlo todo y tiene todos los medios para ello, unidos a los de la izquierda mediática norteamericana muy ridiculizada de ideologizada gracias a la polarización emprendida y fomentada por Obama desde hace nueve años. Por eso está de moda sacudir a los británicos y a los norteamericanos porque los votantes han decidido sin obedecer a esas cúpulas de elites socialdemócratas cada día más intolerantes y arrogantes. Resulta que si no les gusta lo que decide el pueblo lo castigan. Así han amenazado a muchos electorados con unas injerencias electorales obscenas desde Bruselas y desde Berlín que ya lo hace sin ningún complejo. El Brexit no ha sido un gesto demente sino un proceso que revela, por vía del miembro más peculiar y de más profundo carácter democrático de la UE, el Reino Unido, que el déficit de democracia en la unión de 28 no puede ser superado con la autocracia de Bruselas, con Juncker y compañía insultando y amenazando a todo país o sociedad que no les obedezca. Por mucho apoyo de Berlín y París que puedan tener. Que también esta en cuestión porque la resistencia en Francia y Alemania es cada vez mayor y el éxito de esa solución artificiosa de Macron no debiera engañar a nadie.
5) Para finalizar, ¿qué solución crees que debería ser adoptada en Europa Occidental para poner fin al riesgo de islamización (en Estocolmo y no pocas ciudades francesas, británicas y alemanas, hay bastantes barrios en los que rige la Ley Islámica)? ¿No cree, que aparte del buenísimo y la obsesión del establishment con el multiculturalismo, la sociedad europea ha tenido parte de culpa al dejar de afirmarse en cuanto a los valores cristianos del continente?
Europa está compuesta de Estados muy pequeños para competir en el mundo, Alemania incluido. La India y China tienen un acuerdo comercial para pronto 2.500 millones. Alemania apenas tiene 85. Es obvio que los europeos necesitan un espacio económico común. Pero los intentos de liquidar las naciones llevan a la liquidación de la democracia. La socialdemocracia tiene un proyecto global que haga imposible la disidencia al respecto. Con un creciente alarde de recursos totalitarios. La unanimidad de la prensa alemana en cuestiones como la inmigración da literalmente miedo conocida la historia del país. Pero la revuelta contra esta perversión socialdemócrata que al final es un proyecto totalitario como el comunista con sus formas de coacción suavizadas ha comenzado. Si no hay una solución convincente habrá pronto más casos como el Brexit. Los intentos de imposición de cuotas de inmigración son un ejemplo. Polonia, Chequia, Hungría y Eslovaquia no quieren unas sociedades como las occidentales y tienen perfecto derecho a negarse a aceptar a unas avalanchas de inmigración en su mayoría no integrable que en ningún caso van a ayudar a los países de origen de los inmigrantes y amenaza con destruir las sociedades de acogida. Se está primando la inmigración ilegal sobre la legal (que es casi imposible). Los esfuerzos por liquidar las identidades europeas con sus principios judeocristianos y la democracia de los estados nacionales como forma de toma de decisiones están muy avanzados. Pero también es cierto que los planes se les han estropeado con las referidas revueltas gubernamentales en el grupo de Visegrado, con la revuelta en todos los países occidentales contra el despotismo supuestamente ilustrado de Bruselas y las socialdemocracias nacionales. Y con la llegada de Donald Trump, que puede ser un mal “casting”, y esta cuajado de contraindicaciones como líder, pero también ha tenido la fuerza y libertad personal para llevar a la Casa Blanca un guión necesario. El guión imprescindible, que es la recuperación del respeto a la democracia, a los intereses y decisiones de la sociedad tomadas en libertad y el fin del despotismo de unos políticos socialdemócratas y sus nuevos clérigos de la intelectualidad universitaria izquierdista, que son los cancerberos de la ideología de la servidumbre en el mal menor. De la revuelta para el triunfo de la verdad por encima del eufemismo.
Para finalizar, se agradece a Hermann que nos haya concedido la entrevista, se le desea suerte con el recurso judicial a interponer y, se reitera el apoyo de todo el equipo del CdV, además de las firmas de nuestra campaña.
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